El neerlandés es consciente que deben mejorar muchos aspectos de cara a 2025 para acercarse a Ferrari y McLaren.
Hasta los genios necesitan buenas herramientas y Max Verstappen es consciente que si su Red Bull empieza la temporada que viene igual que como ha acabado este año, su era de imbatibilidad puede terminarse.
No es un secreto para nadie que Max no ha tenido el mejor coche durante gran parte del año. Hasta Miami, su RB20 sí que era el mejor, pero en ese momento McLaren dio un gran paso, al que más tarde se uniría Ferrari y el neerlandés tuvo que sudar gota fría para lograr ser tetracampeón del mundo, pues en muchas carreras no tenía ni el tercer mejor monoplaza y quedaba relegado fuera del podio. Aún así en Milton Keynes no se rindieron, encontraron alguna pequeña solución y Max demostró que con poco hace magia.
La temporada 2025 de F1 es la última con este reglamento y, en principio, no se espera grandes cambios en los coches, ya que queda muy poco que exprimir de estas nuevas normas. Si todo sigue el curso que debería seguir, el Red Bull nacería como el tercer mejor coche y Verstappen ya ha avisado que no se ve ganando el título otra vez si no cambian las cosas: “Si seguimos así no seré campeón el año que viene. Es así de simple”, afirmó contundentemente el cuatro veces campeón del mundo en telegraaf.
” Realmente necesitamos tomar medidas para ser competitivos la próxima temporada. Es así de simple ” – Max Verstappen
Los problemas de Red Bull
Aún así, todo está muy igualado y si encuentran alguna pieza efectiva, el nuevo Red Bull podría estar más cerca de los McLaren y los Ferrari y por eso Max lanzó un mensaje a sus ingenieros y mecánicos: “Realmente necesitamos tomar medidas para ser competitivos la próxima temporada Confío en que el equipo pueda solucionar los problemas de equilibrio de la temporada pasada”, reconoció.
Los problemas se ven a simple vista, pero encontrar una solución en un año donde todos los equipos se centrarán más en 2026, con el cambio de normativa, que en 2025, no es tarea fácil y será muy importante que el coche nazca bien: “Y algunas cosas que no pudimos arreglar el año pasado cambiarán el próximo año. Sabemos que tenemos que hacerlo mejor en los bordillos, los baches y las curvas lentas. Estos son generalmente nuestros puntos débiles. Si volvemos a ser derrotados, será por pura velocidad”, concluyó.