La FIA ha sido el centro de atención de la Fórmula 1 recientemente, con importantes novedades que afectan tanto a la gobernanza como a los aspectos técnicos del deporte. La repentina salida del director de carrera, Neils Wittich, reemplazado por Rui Marques, ha suscitado dudas, sobre todo cuando solo quedan tres carreras en la temporada 2024.
Oficialmente, la FIA declaró que Wittich renunció para “buscar nuevas oportunidades”, pero Wittich reveló a Motorsport Magazine que no renunció voluntariamente, insinuando que en realidad fue despedido. Esta revelación alimenta las especulaciones de que el presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, podría estar cambiando el liderazgo en respuesta a las recientes controversias, incluidas las relacionadas con los procedimientos de seguridad en clima húmedo en Interlagos.
Según se informa, la salida de Wittich se debe a las tensiones con los líderes de la FIA y a las críticas por las decisiones tomadas durante las carreras, en particular en el Gran Premio de São Paulo, donde los retrasos en la bandera roja durante la intensa lluvia llevaron al escrutinio del juicio de Wittich. La FIA ha nombrado ahora a Marques, una figura experimentada en las carreras de F3 y F2, como reemplazo de Wittich. Marques, conocido por su estricto cumplimiento de las reglas de seguridad, puede traer una nueva filosofía, pero la pregunta sigue siendo si esta nueva dirección aliviará las tensiones dentro de la FIA o generará más.
Para colmo de males, la FIA ha completado su investigación sobre el supuesto “dispositivo de modificación de la altura de la carrocería” de Red Bull utilizado en condiciones de parque cerrado. McLaren y otros equipos sospechaban que Red Bull utilizaba un dispositivo que podía ajustar la altura de la carrocería de su coche entre las sesiones de clasificación y de carrera, lo que podría ofrecer una ventaja. Sin embargo, tras inspeccionar la sede de Red Bull, la FIA concluyó que no se había producido ninguna infracción de la normativa, afirmando que el componente era inmóvil una vez instalado. Aunque McLaren y otros equipos podrían no estar satisfechos con este resultado, subraya la postura de la FIA de que el coche de Red Bull cumple con las normas actuales, al menos tal y como se interpretan en 2024.
La investigación de Red Bull es una de las varias disputas técnicas de esta temporada. Las recientes acusaciones contra McLaren de utilizar un “truco para enfriar los neumáticos” provocaron una mayor investigación. Se acusó a antiguos empleados de Red Bull, ahora en McLaren, de añadir agua a los neumáticos para aumentar su durabilidad, pero el análisis de la FIA no encontró pruebas de irregularidades. La controversia sobre el enfriamiento de los neumáticos sigue a la controversia de principios de temporada relacionada con el alerón flexible de McLaren, que fue modificado tras el escrutinio de los equipos rivales.
Estas controversias superpuestas reflejan una temporada competitiva y polémica para la FIA, ya que los equipos aprovechan todas las ventajas técnicas posibles. Con solo tres carreras restantes, la atención ahora se centra en cómo Marques manejará su nuevo papel como director de carrera bajo un mayor escrutinio. Además, las decisiones de la FIA, especialmente con respecto a la configuración del monoplaza de Red Bull, insinúan que la rivalidad entre equipos puede persistir a medida que la temporada 2024 se acerca a su fin.