A medida que la temporada de Fórmula 1 se acerca a su dramático final, Red Bull Racing se enfrenta a una encrucijada crucial con respecto al futuro de Sergio Pérez. Con el Gran Premio de Abu Dabi marcando el final de la temporada 2024, los accionistas de Red Bull están listos para celebrar una reunión crucial para decidir el destino del piloto mexicano. Si bien Pérez sigue siendo optimista sobre su futuro en el deporte, una serie de actuaciones decepcionantes han generado dudas significativas sobre su papel a largo plazo en el equipo.
La posición de Pérez ha estado bajo escrutinio desde mediados de temporada. A pesar de un comienzo prometedor que lo vio conseguir podios, sus problemas posteriores han sido evidentes. En las últimas 14 carreras, incluidas dos pruebas al sprint, Pérez ha logrado apenas 43 puntos, y su mejor resultado fue la sexta posición. Esta mala racha contrasta marcadamente con la de su compañero de equipo Max Verstappen, quien se aseguró su tercer campeonato mundial consecutivo y superó regularmente al resto a pesar de los desafíos técnicos de Red Bull a mitad de temporada.
El asesor del equipo Red Bull, Helmut Marko, no ha dudado en sus críticas, destacando la diferencia de rendimiento entre ambos pilotos. “Si Sergio estuviera cerca del ritmo de Hamilton, Russell o Ferrari, tendríamos asegurado el Campeonato de Constructores”, comentó Marko durante el fin de semana del Gran Premio de Las Vegas. Christian Horner, el director del equipo, se hizo eco de sentimientos similares, enfatizando la importancia de tener dos pilotos operando al máximo rendimiento para asegurar el dominio de Red Bull en ambos campeonatos.
A la situación se suma la complejidad del respaldo financiero que Pérez aporta al equipo. Su asociación con el multimillonario mexicano Carlos Slim le ha proporcionado importantes fondos de patrocinio, un factor que Red Bull debe sopesar frente a sus resultados inconsistentes. Sin embargo, Red Bull nunca ha sido un equipo que priorice las ganancias financieras sobre el rendimiento. La perspectiva de perder el primer puesto en el Campeonato de Constructores en 2024 solo intensifica el escrutinio sobre el asiento de Pérez.
Red Bull tiene una gran cantidad de jóvenes talentos esperando entre bastidores, siendo Liam Lawson y Yuki Tsunoda los principales candidatos. Lawson, que impresionó durante sus apariciones como suplente a principios de la temporada, ha demostrado su capacidad para ofrecer resultados sólidos a pesar de su limitada experiencia. Sus resultados entre los 10 primeros y sus constantes actuaciones lo han convertido en un fuerte candidato para asociarse con Verstappen. Por otro lado, el reciente noveno puesto de Tsunoda en Las Vegas y su incansable esfuerzo por superar a sus compañeros de equipo refuerzan aún más sus posibilidades de ascenso.
A pesar de sus logros, tanto Lawson como Tsunoda se enfrentan a desafíos únicos. El tiempo limitado que Lawson lleva en la Fórmula 1 puede generar dudas sobre su preparación para un puesto de primer nivel. Mientras tanto, los vínculos de Tsunoda con Honda (un socio clave que está en transición hacia Aston Martin) podrían complicar el proceso de toma de decisiones de Red Bull. El equipo debe navegar con cuidado por esta dinámica para garantizar la estabilidad a largo plazo.
Para Pérez, lo que está en juego es más importante que nunca. Aunque sigue creyendo firmemente en la capacidad de Red Bull para ofrecer un monoplaza más competitivo en 2025, su futuro puede depender de las decisiones que se tomen después de Abu Dabi. El equipo no tiene intención de esperar hasta Melbourne la próxima temporada para abordar su alineación de pilotos, como confirmó Horner.
A medida que se acerca la decisión, Red Bull debe afrontar una cuestión fundamental: ¿deberían priorizar el dinero de patrocinio que aporta Pérez o centrarse en promover talentos emergentes que podrían restaurar el dominio de su constructor? La próxima reunión de accionistas probablemente determinará si el viaje de Pérez en la Fórmula 1 continúa con Red Bull o si el equipo opta por un nuevo comienzo.
Ahora, la atención se centra en Abu Dhabi, donde Pérez necesitará una actuación sólida para reforzar su posición. Mientras tanto, Lawson y Tsunoda siguen preparados, ansiosos por aprovechar la oportunidad de consolidar sus posiciones dentro de la familia Red Bull. Para los fanáticos, la intriga que rodea a la alineación de pilotos de Red Bull garantiza que el drama fuera de la pista rivalizará con la acción en la pista, lo que mantendrá el final de la temporada 2024 tan atractivo como siempre.